sus númenes son vampiros
brujas, espectros, caribes...
su paraiso, el infierno
su vida, suplicio horrible
oye el lúgubre ronquido
con que del mundo maldicen
que sólo han visto pintado
en biombos y tapices
y el afán con que pretenden
en fuego y sangre fundirle,
como el que abrasó la cama
para acabar con las chinches
observa el raro contraste
de sus gracias infantiles
con la seriedad ridícula
de sus pláticas bilingues
No hay comentarios:
Publicar un comentario