lunes, 29 de junio de 2015

EL ESPEJO






Me sudan las manos, tanto que mis dedos resbalan sobre las teclas. Mi mente está confusa y no puedo poner en orden mis pensamientos, de hecho he empezado a escribir estas líneas no menos de diez veces y otras tantas han terminado en el cubo de la basura. Pero tengo que conseguirlo porque sé que muy probablemente sea lo último que haga en esta vida y no debo de irme sin por lo menos dejar una razón de de mi cobardía, del por qué de mis miedos.
Desde que nací hace ya más de 40 años he estado luchando para llegar a ser alguien de provecho, primero formándome y luego desarrollando esa formación en el mundo laboral. Siempre con la meta del reconocimiento y la aceptación de la sociedad y cómo no, del mío mismo, pues la educación recibida no entiende de otra forma la autorrealización que la aceptación y la integración en la gran manada.
He de decir que me siento orgulloso de lo conseguido. Tengo un trabajo en el que me siento valorado y que me permite vivir holgadamente, una bella y amante esposa y la bendición de un hijo. La salud tampoco me falta aunque a esta edad la damos por hecho. Mi relación tanto familiar como con las amistades es cordial, tan cordial, que me atrevería a tildarla de sinceramente afectuosa.
 Cualquier persona que lea estas letras podrá pensar que tengo una vida moderadamente feliz y no le faltaría razón. Es más, puede que incluso sienta el flagelo de la envidia y que piense que estas palabras solo sean una parrafada de un paranoide trasnochado. Créanme hasta hace unas horas yo también lo afirmaría. Todo comenzó esta mañana.

Como todos los días me disponía a asearme, cuando al mirarme en el espejo vi algo que se movió en el fondo, como una sombra detrás de mí. Me giré y no vi nada. La luz reflejada en el espejo que después rebotaba en los azulejos me había jugado una mala pasada. De todas formas decidí encender además de los apliques que ya lucían a ambos lados del espejo, el plafón del techo, con lo que el cuarto de baño se llenó de luz blanquecina reflejada infinitamente sobre los baldosines también blancos dándole un aspecto aséptico, casi de hospital. Llené el lavabo con agua tibia y me lavé la cara. Luego tomé la maquinilla de afeitar y la dejé en el fondo del agua, mientras me aplicaba sobre la cara la espuma de afeitar que desde siempre me hacía evocar la imagen de un pastelero untando de merengue un pastel. Como un autómata comencé a deshacerme de la escasa barba que me había crecido desde el día anterior. Las dos hojas de acero se deslizaron sobre la tez como una quitanieves, apartando la espuma y rasurando el vello; dejando una banda de piel rosada a su paso. Siempre primero el lado izquierdo de la cara y siempre desde el nacimiento del pelo junto a la sien, hasta el lóbulo de la oreja donde terminaba la patilla. 

Enjuagué la maquinilla a la vez que le daba unos pequeños golpecitos en la porcelana del lavabo para liberarla del exceso de espuma cargada de pelo cortado. El agua se enturbió de jabón y sangre. Debía de haberme cortado, busqué en mi reflejo la herida. Efectivamente estaba allí, la línea roja marcaba el lugar. Una gota de sangre manó del corte cual lágrima roja y tras rodar unos centímetros rompió en el arrecife de espuma de afeitar tiñéndolo. Instintivamente me chupé el dedo índice de la mano derecha y como si fuera un hisopo de algodón empapado en desinfectante me toqué el corte, no sé si con la idea de valorar su alcance o con la fe de que su simple contacto lo cicatrizaría. 

La mínima presión hizo que otra gota manara, esta vez más gruesa. Al parecer el corte no había sido tan superficial. Era increíble lo afiladas que podían llegar a estar esas cuchillitas. El reguero rojo brillante seguía fluyendo, decorando el merengue/espuma con el sirope/sangre. La yema del índice noto un roce debajo de la calidez húmeda de la sangre. La piel seccionada se había retraído, haciendo que los bordes del corte se curvaran levemente hacia fuera formando algo parecido a unos labios. Sentí la imperiosa necesidad de volver a tocarlos, de notar el beso de esa nueva boca de mi cara. Entonces es cuando se desató el frenesí.

No sabría explicar qué me poseyó, qué extraño instinto primitivo y bestial, qué fuerza maligna. El caso es que la misma imperiosa necesidad, solo que multiplicada por un millón, de tocarme la herida ahora me obligaba a que el resto de los dedos quisieran toquetear y hurgar en el corte como si ya no fuera mis dedos y como si ya no atendieran a mis órdenes sino más bien fueran lampreas y mi mano una especie de Medusa que los tuviera por cabellos. Los dedos arañaban, se introducían en el corte desgarrándolo, haciéndolo más grande, la minúscula raya roja la cara se había convertido en la grotesca cuenca sin ojo. La sangre manaba abundantemente. Pero no sentía ningún tipo de dolor muy por el contrario, un cálido cosquilleo parecido al deseo sexual me asaltaba. Sólo deseaba seguir tirando, llegar al clímax, desollarme la cara hasta dejar el hueso al descubierto. Por eso no dudé de ayudarme con la otra mano. Mi rostro ya no tenía aspecto humano, era el cadáver de alguna bestia desguazada por buitres famélicos. No había parados, ni cejas, ni labios y de la nariz sólo quedaba un escoyo gelatinoso. La piel había desapareció y nadaba en el lavabo en una amalgama de sangre y espuma de afeitar o colgaba del cráneo en jirones, los músculos también habían sido desgarrados, arrancados de los ligamentos y pendían flácidos haces. Jadeaba frente al espejo contemplándome, no era un orgasmo, era la madre de todos. 

Pasaron unos minutos
Las dos manos estaban apoyadas en el lavabo, lo que quedaba de mi cara, mirando esa sopa malsana que contenía el lavamanos y como caían en ella las gotas de sangre mas rezagadas. El dolor comenzó también repentinamente y fue in crescendo con cada latido. Era como si con cada sístole, diástole te apagaran en la cara un cigarro, luego diez, cien a la siguiente y así hasta sentir el calor de un infierno. El concepto locura no era suficiente, era incompleto, infantil y escaso.
- ¡Mírate!
Obedecí a aquella voz. Un gorgoteo infrahumano, proveniente de debajo de todo aquel dolor, de donde brotaba, de su fuente, de su raíz. La voz del Mal mismo.
El anciano estaba allí. Debajo de la sangre, de los jirones de piel, debajo de las piltrafas de carne, debajo de todo aquel dolor estaba él. Aquella era la última gota de dolor que podía soportar. Mi cabeza era un útero por donde asomaba un anciano con la cara manchada de sangre que me hablaba. Pero ése era mi cráneo y ése no podía ser yo.
Me llevé las manos a la cara para palparme aquel nuevo rostro buscando un clavo ardiendo de realidad donde poder agarrarme.
- Yo soy tu verdadero tú
Las palabras salían de mi nueva cara pero yo no las pronunciaba igual que una marioneta de un ventrílocuo que toma conciencia de ella misma.
El viejo gritaba enfurecido, con cada grito el dolor crecía y crecía, abrasándome por dentro, derritiéndome
-¡Todo es mentira, todo es mentira! ¡Tú eres mentira, esta sangre es mentira, maldito! ¡NO ME VENCERÁS ALZHÉIMER!


                                                                              FIN




martes, 23 de junio de 2015

DEATH METAL









Más rápido, más alto, más fuerte. No, no me refiero al lema de la Olimpiadas de Múnich de 1972, aludiendo al discurso que pronunciara el barón Pierre de Coubertin en la inauguración de los primeros Juegos Olímpicos de la Edad Moderna, allá por 1896 en Atenas, ¿o tal vez sí? Lo cierto y verdad es que este lema recoge la esencia del tema que voy a tratar y que no es otro que el Death Metal.

Sí, mi queridos lectores; Death Metal es quizás una de las expresiones musicales menos y peor valoradas del mundo, y no sólo me refiero a los ajenos al mundo del metal, sino incluso también dentro de su propia familia metálica. Es por ello que quiero acercarles un poco a la bestia y quizás, viéndola desde otro ángulo, le pierdan el miedo y le den una nueva oportunidad.


El Death Metal nació como cualquier otra manifestación artística; para dar respuesta a la necesidad de expresión de unos sentimientos. Pero esta vez eran unos sentimientos que estaban en las mazmorras del cerebro, de ese cerebro primitivo heredado de nuestros ancestros reptilianos, y qué mejor banda sonora para ellos que el Death, música brutal y extrema donde las haya. Para ello no dudaron de ir más alto, más rápido y con más contundencia que nadie. Aquellos sentimientos necesitaban de un sonido tan bestial y desesperado como nunca se había oído hasta el momento, para poder transmitir su mensaje. Bandas como Venom o Slayer fueron los abuelos que plantaron esas semillas negras que no tardarían en germinar allá por los primeros años 80. Aparecieron entonces y simultáneamente en todo el mundo otras nuevas que empezarían a dar forma a lo que después se llamaría Death Metal. Entre las más destacadas, y por así llamarlas padres del Death, están Possessed y Death (aún con el nombre de Mantas) con sus respectivas demos “Death Metal” y “Death by Metal”. Poco después, a miles de kilómetros, en Brasil, otra banda llamada Sepultura sacaba el primer disco propiamente Death, “Bestial Devastation”. La máquina de picar carne había comenzado a rodar y pronto también saltaría a Europa, donde las bandas proto-Death como Destruction y Sodom también habían abonado el camino de algo que ya era imparable.

 

                                    


             
                             (seguro que sabrán perdonar su baja calidad de audio por su valor documental) 







En un primer vistazo puede parecer un música simple, primigenia, pero si la observamos con cuidado es mucho más que eso. Derivada del Thrash (que a su vez deriva del punk y el heavy metal) el Death se caracteriza por unos tempos abruptos, numerosos cambios de ritmos y sucesiones erráticas de acordes, además del uso de escalas muy exóticas. Uno de sus signos más característicos son las voces, voces guturales conocidas como “growls” o gruñidos que pretenden trasladar al oyente esas sensaciones de angustia, agonía… del cual el Death es heraldo. Normalmente las bandas que practican esta disciplina están formadas por dos guitarras que hacen la función tanto de solista como rítmicas y que se turnan en la ejecución de los solos.

El bajo suele ser el instrumento elegido por el vocalista, aunque no es una norma estricta y a veces el vocalista no toca ningún instrumento pasando el bajo a sustituir a una de las guitarras. El batería es otro miembro destacable en las bandas de Death Metal.

La batería Death se diferencia de la del Rock en que en el estilo extremo no es una guía de la música, si no que levanta un muro sónico detrás de ella con entidad propia. Muchos de ellos tienen formación académica clásica e incluso jazzística pues muy al contrario de lo que parece, la ejecución de estos temas necesitan de un gran dominio de la técnica además una gran fuerza física, pues son muy complejos y potentes.

Las guitarras se afinan siempre muy graves e incluso hay grupos que introducen guitarras con 7 cuerdas con el fin de aumentar esta característica, haciendo ensambles que buscan un clima más opresivo, y las distorsionan mucho usando pedales. Otros en cambio, prefieren dar una claridad máxima a su música para que se pueda apreciar su precisión técnica, casi quirúrgica.

Otro aspecto a destacar son las letras, que en el Death Metal abarcan cualquier aspecto oscuro de la mente humana, desde el terror más básico al pánico más filosófico. Letras plagadas de asesinos, zombis y pesadillas bizarras. El Rock nos trajo un mensaje de rebeldía, el Heavy Metal nos dio la épica y la fuerza para intentar cambiarlo, el Punk nos recordó que no había futuro y el Death simplemente nos aniquila.



Es curioso cómo el Death, a pesar de su nombre, está muy vivo e inquieto, y bebe de múltiples fuentes, mutando, mezclándose con todo lo que toca, como una hidra que evolucionase va adquiriendo nuevas cabezas, que conforman un universo casi infinito de subestilos, que va enriqueciendo aquella música original. Me gusta compararlo con el asesino en serie que va aprendiendo con cada nuevo crimen. Así podemos apreciar desde bandas que buscan la contundencia máxima (BrutalDeathMetal), a grupos que introducen melodías haciendo a la bestia más accesible al gran público (MelodicDeathMetal). Otras se centran en una precisión sádica en sus composiciones con unas composiciones donde prima la técnica (TecnicalDeathMetal).

Podríamos seguir hablando de características musicales, de estructuras, de escalas, de influencias… Pero este no el fin de estas letras. Su único afán, es que ustedes, descubran este maravilloso estilo donde el músico es totalmente libre para abrir su armario y dejar salir todos los monstruos, y donde puede ponerse a prueba llevando tanto su técnica como su creatividad al límite de lo humano.



Escribidor suyo @hothorchata



¿Quiere escuchar Death Metal?. Pulse aquí..si se atreve



lunes, 22 de junio de 2015

De Figueres a New York. Un rockero y un pintor.

O un genio loco de atar, así tambien era definido Salvador Felipe Jacinto Dalí i Doménech (nacido en Figueres) por amigos, conocidos, familiares y compañeros de otros gremios, pues no dejaban de tener serias dudas sobre su salud mental y qué relación podría existir entre ese comportamiento y su genialidad.

Vincent Damon Fournier (nacido en Detroit) y conocido artísticamente con el seudónimo de Alice Cooper, que empezó como banda a funcionar en los 60's influenciado por otro excéntrico, Frank Zappa.
Alice como banda, no fueron pioneros en el estilo de rock-band teatralizado, pero lo llevaron a un plano más avanzado, incorporando a sus shows escenas con asesinatos, brujas, ejecuciones, serpientes y una estética fantasmagórica sobretodo, en el personaje de Alice, caracterizado con maquillaje y aderezos en el vestuario que le daba un aspecto siniestro e inquietante, pero no por tanto teatro, descuidaban la música.
En la mayoriá de los casos, sus discos son conceptuales, desde las portadas a las letras y concepción musical.
Esta forma de ofrecer discos y shows terminó llamándose '' Shock-Rock'' y mostró el camino para que bandas posteriores como Kiss, White Zombie, Motley Crue, Twisted Sister, Mercyful Fate o Lordi dieran otra visión de lo que puede ser un concierto de Rock escenificado. No sólo música y poses, ir más allá y envolver el escenario en toda una representación teatral.
Dos espectáculos al precio de uno.
Y sin tener que cambiar de escenario, como ocurre en la mayoría de festivales actuales, que es imposible ver todos los grupos que tocan, porque suelen coincidir y hay que elegir.
Eso sí que me parece un engaño.

Siempre digo que los buenos terminan juntándose y esta es una buena muestra de ello.

Qué clase de extraña y absurda conexión pudo haber entre dos personajes tan dispares, de continentes y culturas tan diferentes? Qué hace un escultor, pintor, ilustrador, diseñador de joyas junto a un roquero? Cuando hablaban de elevar el espíritu y la percepción del yo para concebir sus obras, se referían a ''viajar'' gratis?

Dalí ya había estado anteriormente en EE.UU.en los años 30's con Gala y no dejó de volver a visitar el continente americano, hasta que en los 70's por esos caprichosos avatares del destino, presenció un concierto de Alice Cooper, quedando alucinado con todo lo que vió: una banda con imagen inquietante, haciendo música inquietante y una escenografía en consonancia con todo eso.


Después del show, se conocieron y Dalí invitó a Alice a pasar unos días en su casa, dando fruto de esta nueva amistad dos retratos-holograma titulados Alice Cooper's brain.
Poco después, en 1973, Alice Cooper editan el disco ''Dada'' con la portada ocupada por un fragmento del cuadro: ''mercado de esclavos con la aparición del busto invisible de Voltaire''.






El holograma diseñado por Dalí hoy día está valorado en cinco millones de dólares.

Tras la presentación del disco, los dos artistas dieron una rueda de prensa. Dalí todo de blanco y Alice como buen roquero, todo de negro. La noche y el día.


Los presentes en el acto público cuentan que en la charla, Dalí no paraba de hablar, explicando sus ''porqués'' acerca de el trabajo en común, la percepción e influencia entre ellos y los motivos del diseño de la portada del disco, mientras Alice se mostraba abstraido, ausente, mientras bebía de una lata de cerveza.
En un momento de la reunión, un periodista le preguntó a Alice que qué opinaba sobre lo que estaba hablando Salvador, a lo que éste, con toda la amabilidad del mundo contestó: ''ni idea, no tengo ni idea de nada de lo que dice. desde que nos conocemos, no he entendido ni una palabra suya''.





En ése momento, un exaltado Dalí (como no podía ser de otra forma) exclamó: ''perfecto!! confusión. la mejor forma de comunicación!''.

Broche de oro, jugada maestra de los ejecutivos de la discográfica, genios en estado puro, todo por el show...no importa, da lo mismo.
Seguramente, para Dalí sólo fuera una curiosidad más en su incontenible flujo creativo, provocador y chispeante, pero estoy convencido que nunca, ningún artista ha tenido mejor rueda de prensa para presentar una obra artística como la que tuvo Alice Cooper.






Dalí ya nos dejó, pero dejó un legado impresionante en forma de dibujos, diseños, bocetos, pinturas, etc. pero la carrera musical de Alice continua aún hoy en día.

Si tuviera que quedarme con lo más representativo de ambos casos, aunque siempre es injusto quedarse con una sola muestra, pero sería el cristo de Dalí




Y el veneno de Alice:



Me gusta el Rock en cualquiera de sus acepciones, subgéneros, categorias o como les quieran llamar.
-No hay más preguntas, Señoría!



Mantengo humildes mis orejas.




viernes, 19 de junio de 2015

1985 Un cuentacuentos con nombre de helado.

Hola de nuevo, criaturas, ahora que ya pasaron las resacas de la celebración de nuestro primer añito de vida y ya que han vuelto las aguas a su cauce, aquí estoy de nuevo, dispuesto a compartiros un buen puñado de música y su origen. Lo que viene siendo un rememberin' en toda regla, especialmente indicado para quien le guste el Rock elegante, que no comercial.

Un Rock que parece tener desde hace unos pocos años una revitalización, un despertar desde que en los 90's llegara el Grunge y arrasara con lo establecido hasta ése momento: estaban desapareciendo bandas emblemáticas como Led Zeppelin, ya casi no se llevaban esos conciertos de tres horas donde cada integrante tenía tiempo de hacer su correspondiente solo, en algunos casos de hasta treinta minutos, lo que empezaba a ser algo tedioso, pero bandas como Soundgarden, Pearl Jam o Nirvana se encargaron de hechar por tierra esos conceptos de show.

Eran bandas (me refiero al Grunge) que se caracterizaban por la crudeza de la música, no quedando atrás las letras comprometidas sobre cualquier asunto de interés general, entiéndase los conflictos de la época, los problemas reales de la juventud y un descaro en exponerlos no falto de dureza, algo que no se atrevían a hacer las bandas que tambien tenían fans muy jóvenes, como Maiden, Judas, mis amados ACCEPT o AC/DC, donde no sólo había buena música Heavy, tambien llevaban unos show muy visuales, bien teatralizados y con una iluminación digna de una peli del espacio, pero sus letras iban más por otros derroteros, digamos más standards.

Pero como los asuntos musicales son cíclicos, el Grunge como tal fué perdiendo impacto y hacia el año dos mil, pocas eran las bandas que sobrevivían, como Pearl Jam, que supieron evolucionar y relanzar su carrera de acuerdo a los nuevos tiempos que llegaban y así, muy poquito a poco, el AOR fué saliendo de nuevo a la luz, ocupando un espacio más relevante y merecido en la actualidad musical roquera.

AOR? Qué es eso? Bien, yo tampoco lo sabía, ni tenía por qué saberlo, siempre digo que las etiquetas en la música son indignas, pero alguna guía o referencia debe haber para buscar.
Sólo conozco dos clases de música: la que me gusta y la que no. Y este género me encanta!

AOR quiere decir: Adult Oriented Rock (Rock para adultos) denominación de origen americano no falto de polémica al menos por mi parte, ya que el Rock no tiene edad, es como el café con leche, que no pasa de moda. Lo de ''orientar'' lo puedo aceptar si no es una imposición comercial, aunque las miles de emisoras de radio americanas lo designaban así para que sus oyentes no tuvieran dudas de los estilos musicales que iban a oir. Todo tiene un público, pero vamos a ver: si te gusta el rock, debería darte igual el sub-género, todos tenemos preferencias, pero en una emisora normal, me gusta que haya variedad. El fútbol no tiene edad, los dibujos animados no tienen edad, divertirse es obligatorio a cualquier edad. Acaso el mal llamado género chico (la Zarzuela) tiene edad? No.
El Rock tampoco.

El AOR se empezó a originar a mediados de los 70's entre varios músicos de sesión que tenían sus propias ideas y canciones y en vez de venderlas, querían disfrutar de ser ellos los que las interpretaban. De esta forma empezaron a salir a la luz bandas como Journey, Toto, Boston, Asia, Kansas, Foreigner, Styx, Survivor y un largo etc..
Eran músicos profesionales que en la mitad de los casos, ni les gustaba lo que grababan, pero sus contratos decían que sí y fueron acumulando canciones según ellos las veían y les daban forma.

Este estilo no es tan duro como para llamarlo heavy metal ni tan lights como para considerarlas pop y con un deseado y agradecido buen gusto para las melodias vocales e instrumentales, predominando en la mayoría de las veces los sonidos limpios y muy bien ejecutados, predilección por las buenas canciones y afán por vestir de gala cada una de ellas, encargándose de eso casi siempre los teclados y orquestaciones.

Para reflejar lo que estoy exponiendo, quiero compartir un disco que a mi parecer, es de los más representativos de la escena de la época. Viajamos en el tiempo y llegamos a 1985 donde la banda MAGNUM edita el que para mí es el mejor disco de su carrera: On a storyteller's night.

Magnum son originarios de Birmingham y se crearon en 1972, debutando en el '78 con Kingdom of Madness y hasta hoy han publicado:
18 discos oficiales
9 discos en directo
10 singles
13 videos y dvd's





On a storyteller's night es un disco de puro AOR, casi de rock sinfónico, me atrevería a decir, contiene nueve canciones, es un disco con una línea muy marcada según dicta el título, cuentos, historias fantásticas, viajes, amores..sin llegar a ser lo que venimos conociendo como un disco conceptual, pero en cada corte hay una historia, un cuento que merece ser oído, escuchado y disfrutado a ritmo de Rock, de Rock elegante, pero no AOR.


Tan sólo voy a poner una pequeña muestra del contenido tan brillante que tiene el disco, empezando por la primera; How Far Jerusalem


Excelente presentación de disco, de un disco que rezuma calidad y buen hacer a raudales, dando una clara muestra de la capacidad creativa de la banda formada por el guitarrista Toni Clarkin y el cantante Bob Catley.
Aquí la grabación original del disco:


Siempre que hablo de música me gusta poner ejemplos de actuaciones en directo, por que ahí es donde se ve de verdad el potencial del artista, la química y el feeling con el público, pero los buenos músicos son capaces de plasmar en disco su arte y su técnica, por eso pongo en este caso la misma canción en directo y en estudio como muestra de la calidad de estos artistas.

Lo habitual en los 80's era que cualquier banda o artista en solitario que publicara un nuevo disco, llevara al menos un single de representación de la obra a defender y Magnum no iban a ser menos, a fin de cuentas, la industria manda.


Y como single de este disco, está el que es mi canción definitiva de ellos. Seguramente tienen mejores canciones, sobre gustos, colores. Pero es una canción que me ha puesto las pilas en infinidad de ocasiones. Es mi carajillo particular, una subidilla de tensión arterial, un enamorarse, todo un flechazo de letra y música, un irrumpir sin decir ni hola, ni se puede, un vini, vidi, vinci:


Si no mueves aunque sea un poquito el pie, es que estás muerto o el Rock no es lo tuyo!


Y como no encuentro mejor forma de terminar por hoy, me marcho dejando la historia de este disco disco en su punto álgido, en la guinda del pastel, jejeje
Largaa vida a Magnum y perdón por el AOR, aunque si vais de tiendas, igual os ayuda y no perdeis tiempo buscando. Yo lo tengo por dos veces: la primera vez prestado por un vecino, me encantó, compré el vinilo y más tarde en formato  digital.

Casi estoy por decir que suena mejor el vinilo, pero esa es otra historia..










Mantengo humildes mis orejas


domingo, 7 de junio de 2015

AZUL #15





El humo negro salía por la chimenea tiznando el cielo de una de las últimas mañanas del año. El fuego que la alimentaba no se había prendido por casualidad, esa mañana era la propicia. Apenas si había una ligera brisa y su dirección haría que no se alejara demasiado. No pudiendo así ser olfateada por narices curiosas. También la humedad del aire haría su trabajo haciendo que las cenizas que transportaba no fueran más allá del bosque de coníferas que rodeaba y escondía a El Buen Pastor. El horno alcanzaba los 1500 grados centígrados y a esa temperatura toda, absolutamente todo lo humano se convertía en polvo.
Los ojos de la mujer estaban fijos en el cristal por donde se podían observar como las llamas lamian el pequeño cuerpo. Un poco más allá, el doctor Orgaz observaba el termostato con desgana. Particularmente no disfrutaba de esta parte del trabajo, muy al contrario que Livia. Ella si encontraba placentero todo lo macabro; sin embargo a él sólo le movía la Ciencia y esta parte del trabajo no era más que una pequeña molestia. Una vez acabados los experimentos había deshacerse de los especímenes fallidos. 
Sí, la ciencia había sido su obsesión desde que podía recordar, pero el mundo siempre se las ingeniaba para interponerse entre él y el reconocimiento, poniéndole límites absurdos, propios de mentes supersticiosas y atrasadas del Medievo. El Hombre tenía que utilizar todos los medios para alcanzar el conocimiento .Estaban ahí para eso. Para él, como no podía ser de otra forma, el fin justificaba los medios. Aunque los medios fueran vidas humanas. Que fueran niños o no; carecía de importancia. Fue entonces, cuando todo parecía estar perdido cuando apareció Set. Le devolvió su laboratorio y le dio la oportunidad que su genio merecía.

- Doctor, doctor.
-Sí, sí. ¿Qué quiere Livia?
La voz de la mujer lo sobresaltó, sacándolo de sus recuerdos.
-La hora se acerca Él está a punto de llegar.
- Sí, tiene razón Livia. Haremos una última comprobación. Adelántese, en unos minutos iré con usted. Gracias.
La mujer miró hacia el suelo, agradeciendo el cumplido y se marchó y con de ella el ruido de los tacones al subir la escalera de hierro que la sacaban del cuarto de calderas.
El doctor Orgaz se quedó solo, mirando el crepitar de las llamas del horno. Las partes carbonizadas del féretro, comenzaban a desmoronarse como si fueran de arena. Esta vez, casi lo había conseguido. Había estado tan cerca. Pero los nuevos especímenes estaban de camino y esta vez no fallaría.

Las ventanillas del automóvil mostraban la acuarela de trazos imprecisos en que se transformaba el paisaje distorsionado por la velocidad. Los dos niños dormían en el asiento trasero. Kamil ,el más pequeño se apoyaba en el hombro de Kalule ,que lo hacía sobre la manta hecha un ovillo que les habían proporcionado en el puerto. Las dos criaturas estaban exhaustas y el cansancio las había derrotado. Cuando los acompaño hasta el coche ,aún temblaban de frio y/o de miedo . Luis no podría decir cuánto había de lo uno o de lo otro . Con sólo imaginar por lo que habían tenido que pasar para llegar hasta aquí, se le ponía la piel de gallina . Miraba por el retrovisor ,observando como descasaban el uno sobre el otro . Igual que dos cachorros indefensos que esperan a su madre en el cubil. La diferencia estribaba en que ellos no tenían a nadie a quien esperar. Él era todo lo que tenían en el mundo .Por un momento pensó en su hija , rápidamente intentó desechar esa imagen de su mente pero no lo conseguía. ¿Qué estaba haciendo?. ¿Dónde conducía a aquellos niños?. El peso de la evidencia le aplastaba poco a poco el pecho y no le dejaba insuflar aire a los pulmones . Lo sabía, aunque llevara todo el trayecto buscado alguna otra explicación que le satisficiera más. No podía seguir autoconvenciéndose, fuera cual fuera el destino de esos niños, no sería nada bueno. Ahora que lo veía desde esta perspectiva ,todo encajaba mucho mejor. Todo lo que le había sucedido desde que entró en aquella maldita gasolinera comenzaba a cobrar sentido. El viejo tenía razón . Daba demasiadas cosas por sentadas . Se había comportado como un imbécil . "El destino te ha dado una nueva oportunidad" se había dicho a si mismo, muchas veces, porque él era especial. Lo que él era ; era un gilipollas, que se había dejado engatusar por cuatro trucos baratos, guiado por su ambición y su vanidad. Tenía que haber escuchado a Laura. Pero ya era tarde ,se había convertido en cómplice de aquello . No podía cerrar los ojos ante esta barbarie. Debía enmendar su error. 
.El temblor comenzó en la planta de los pies . Primero fue como un espasmo, como un calambre, que recorrió todo su cuerpo . Luego sus tripas se removieron provocando que el desayuno deshiciera su camino. La nausea era incontenible . Agarró con todas sus fuerzas el volante a la vez que frenaba desviando el coche hacía el arcén . El cambio automático y el control de tracción, hicieron el resto evitando el siniestro. Consiguió retener parte del vómito ,pero unos chorros de café y tostadas a medio digerir salieron a reacción tanto por su boca como por su nariz, impregnándolo todo con un lodo ácido y ocre que olía a limones podridos con toques de arábiga.
 En las manchas de vomito sobre el volante y el cuadro de mandos , no sólo estaban los restos de su desayuno si no que también estaban la decepción , el fracaso y una gran dosis de miedo. Todos ingredientes habían se habían cocinado en su interior haciendo una mezcla explosiva .
Sí ;sentía miedo, miedo a oponerse a ese viejo de ojos de hielo azul, que era capaz de comprar niños, dios sabe con qué intenciones; como si fueran ganados. No mucho peor, porque el ganado hacía que su viaje al matadero fuera de primera clase, comparado con el que estos niños habían tenido que sufrir.
Con la mano derecha aun temblado cogió un pañuelo de papel de la guantera y se limpió la boca y se sonó los mocos que aún le escocían en la nariz. Volvió a mirar a los niños ,que seguían durmiendo como angelitos, a pesar del incidente, quizás les hubieran dado algún sedante.  No tenía madera de héroe, muy al contrario se reconocía un poco cobarde y conservador . Todo aquello lo superaba pero la imagen de aquellos niños en el retrovisor hacía que su conciencia mordiera su corazón.
Con otro pañuelo retiró un pegote de vómito de la pantalla del navegador. Todavía estaba a 300km del Buen Pastor, su destino. Aún tenía alguna opción para parar esta locura. Tragó saliva sintiendo su sabor agrio y su quemazón en la garganta a medida que bajaba. Sabía que iba a hacer algo de lo que muy probablemente se arrepentiría ,pero tenía que hacerlo. Tenía que hacerlo porque aquellos niños, eran ahora su responsabilidad.

Continuará...